Paul Bowles (1910-1999) |
"La lluvia, que suele alegrar el corazón de todos excepto el
de los turistas, ha caído recientemente en tales cantidades sobre esta parte
del continente, que incluso lo marroquíes se preguntan si dejará de llover
algún día. Los caminos secundarios han sido bloqueados una y otra vez por las
inundaciones. Las aldeas a la orilla de los ríos han sido destruidas por los
fangosos torrentes que bajan violentamente de las montañas. Los rezadores profesionales
han tenido que refrescar un poco sus ensalmos, ya que ahora la gente les paga
para que lleven a cabo el inusitado servicio de orar para que cese la lluvia".
Paul Bowles, Días y viajes.Ediciones
Folio, 2004.